El presidente de la Corte Suprema, Ricardo Blanco Herrera, presidió hoy – viernes 10 de octubre- la ceremonia de juramento de nuevos abogados y abogadas, donde instó a los profesionales a ejercer su labor con "lealtad y honestidad" y a considerar el profundo legado jurídico que se desprende de la conmemoración del Encuentro de Dos Mundos, ocurrido en 1492.

En su discurso, titulado "El Derecho y el Encuentro de Dos Mundos", el presidente de la Corte Suprema les recordó que la abogacía, si bien representa intereses particulares, siempre conlleva los valores colectivos de "justicia y paz social".

Subrayó que la conciencia total sobre los principios y fines de la profesión es condición para el buen abogado, destacando "el respeto a la ética, justicia, probidad, libertad, y dignidad humana". Además, les recordó la importancia de mantener la "confianza de la ciudadanía en el sistema judicial".

El presidente Ricardo Blanco centró una parte crucial de su intervención en la conmemoración del 12 de octubre, fecha que, a su juicio, marcó una "trascendencia jurídica profunda". Explicó que este hecho planteó interrogantes esenciales sobre si los habitantes de este continente eran sujetos de derecho y generó un gran debate ético y jurídico, impulsado por la Escuela de Salamanca, que defendió "la humanidad y prerrogativas de los indígenas, incluyendo su libertad, propiedad, se sentaron las bases del derecho internacional y los derechos humanos".

El magistrado afirmó que de esos debates "emergió un cambio decisivo: el reconocimiento de que existen principios universales de justicia que trascienden las fronteras, las razas y las religiones".

En este sentido, el 12 de octubre simboliza "el nacimiento de una conciencia jurídica global, que dio origen, siglos después, al Derecho Universal y a la noción moderna de los derechos esenciales del hombre", sostuvo el presidente de la Corte Suprema.

Fuente: Poderjudicial.cl